11M -dedicada a las familias de las víctima de esa masacre-.
Descarnada la mirada
que fría e impávida
te observa descarnadamente
apoderándose del alma doliente.
Fría la tez que sin ojos te mira
descarnándote y apoderándose de tu alma
grave es la voz de la llamada opaca
que susurra tu nombre.
Ayer te mire a la cara
vi tu rostro y me abandoné
gélida la muerte que nos aborda
gélidos sus susurros al oído.
Cansancio del camino
camino del cansancio agotador
búscate otra alma doliente
búscate tus propias ruinas.
Absorta la pálida tez
de la que susurra tu nombre,
mírala a los ojos
¡despéchala!, por ahora.
Fina la línea, entre aquí y allí
entre el hoy y el ayer
entre el presente y el ausente
entre tu y yo.
que fría e impávida
te observa descarnadamente
apoderándose del alma doliente.
Fría la tez que sin ojos te mira
descarnándote y apoderándose de tu alma
grave es la voz de la llamada opaca
que susurra tu nombre.
Ayer te mire a la cara
vi tu rostro y me abandoné
gélida la muerte que nos aborda
gélidos sus susurros al oído.
Cansancio del camino
camino del cansancio agotador
búscate otra alma doliente
búscate tus propias ruinas.
Absorta la pálida tez
de la que susurra tu nombre,
mírala a los ojos
¡despéchala!, por ahora.
Fina la línea, entre aquí y allí
entre el hoy y el ayer
entre el presente y el ausente
entre tu y yo.
-trabajo ”POEMARIO III”
Autor ©Rafa’s-
11/05/2020
Mi mujer lo vivió en primera persona estando en las urgencias del Gregorio Marañón, ese horror no se olvida 🤗🤗
ResponderEliminarNi olvidar, ni perdonar, ni dejar que se vuelva a repetir.
EliminarGracias Javi
Bonita dedicatoria. No olvidar, si perdonar, ya que en el perdonar esta la fuerza de la que los débiles usan las armas. Nos queda la impotencia del porque.....
ResponderEliminarGracias por tu comentario.
EliminarTerrible suceso que marcó nuestra memoria para siempre. Imposible de olvidar y de perdonar cuando desconoces quien fue el responsable de su autoría.
ResponderEliminarGracias por tu comentario
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