VIDA
“¿Para
qué vivir, si la muerte es la única meta y fin de la vida?”.
Ese pensamiento era continuo en su mente desde hacía una temporada “¿Cuál es el motivo de la existencia?”.
Los días eran constantes, grises y vacíos, más aún incluso de lo que él se pensaba, y así una y otra vez.
Una mañana, al salir de casa, el sol cegó sus ojos, él se sacudió como queriendo sacárselo de encima y al volver la cabeza, de repente la vio parada a pocos metros. Ella era altiva, joven y desenfrenada; era su vida que lo miraba fijamente, como reprochándole la pérdida de tiempo.
Él, rápidamente comprendió esa mirada.
Y, ambos se tomaron de la mano y comenzaron una nueva andadura juntos,
abrazándose mutuamente desde entonces.
Ese pensamiento era continuo en su mente desde hacía una temporada “¿Cuál es el motivo de la existencia?”.
Los días eran constantes, grises y vacíos, más aún incluso de lo que él se pensaba, y así una y otra vez.
Una mañana, al salir de casa, el sol cegó sus ojos, él se sacudió como queriendo sacárselo de encima y al volver la cabeza, de repente la vio parada a pocos metros. Ella era altiva, joven y desenfrenada; era su vida que lo miraba fijamente, como reprochándole la pérdida de tiempo.
Él, rápidamente comprendió esa mirada.
Y, ambos se tomaron de la mano y comenzaron una nueva andadura juntos,
abrazándose mutuamente desde entonces.
-trabajo ”MICRORELATOS”
Autor ©Rafa’s-
25/11/2023
¡Me encantó!
ResponderEliminarGracias por tú comentario.
EliminarEs lo único cierto, gracias
EliminarÑos colega
ResponderEliminarÑooooossss
EliminarNo estoy de acuerdo en que la muerte sea la meta. ¿Para qué vivir? Es egoísta pensar que uno vive para sí mismo, las acciones y actos realizados a lo largo de nuestra existencia también afectan a los demás, es especial a los cercanos.
ResponderEliminarVivir, no pensar en el mañana, pero vivir. Un abrazo
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